Resultaría cómico si no se tratara de un asunto tan serio como la salud, en concreto, nuestra salud mental. La empresa, con total desfachatez, hace oídos sordos a cualquier tipo de reivindicación. Antiguamente replicaba, y había un tira y afloja entre lo que reclamaban los trabajadores y lo que la empresa quería ofrecer. Finalmente se alcanzaba un acuerdo; bien es cierto, que más del gusto de la empresa que del nuestro, pero al fin y al cabo se llegaba a un consenso con los sindicatos, aunque fuera a la baja. Pero hoy en día la empresa es como un muro donde se estrellan nuestras peticiones, convertidas de pronto en lamentaciones. Ya no se limita a rebatir, directamente rechaza cualquier pretensión sindical negándose en redondo, haciendo que reboten en ella las propuestas como en el sólido paramento de un frontón.
CAMPSARED BLOG
ESTACIONES DE SERVICIO REPSOL "Hola compañeros, soy un expendedor como vosotros. Este blog esta creado con el ánimo de que dejéis vuestros comentarios, quejas, opiniones, etc.
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Este blog, como indica en la cabecera, originariamente fue creado por un compañero llamado EXPENDEDOR-VENDEDOR el 20 de noviembre de 2008 pero problemas técnicos le impidieron actualizarlo, lo que dio pie a la creación de esta segunda etapa renovada que es la que se abre a continuación.
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1 de agosto de 2025
AGOSTO-SEPTIEMBRE 2025, Comentarios
Resultaría cómico si no se tratara de un asunto tan serio como la salud, en concreto, nuestra salud mental. La empresa, con total desfachatez, hace oídos sordos a cualquier tipo de reivindicación. Antiguamente replicaba, y había un tira y afloja entre lo que reclamaban los trabajadores y lo que la empresa quería ofrecer. Finalmente se alcanzaba un acuerdo; bien es cierto, que más del gusto de la empresa que del nuestro, pero al fin y al cabo se llegaba a un consenso con los sindicatos, aunque fuera a la baja. Pero hoy en día la empresa es como un muro donde se estrellan nuestras peticiones, convertidas de pronto en lamentaciones. Ya no se limita a rebatir, directamente rechaza cualquier pretensión sindical negándose en redondo, haciendo que reboten en ella las propuestas como en el sólido paramento de un frontón.
1 de mayo de 2025
1 de marzo de 2025
MARZO-ABRIL 2025, comentarios
DONDE LAS DAN LAS TOMAN
Últimamente, nos hemos ido acostumbrando a la presión, a que nos digan cómo, cuánto, y qué tenemos que vender. En el siglo pasado, los baby boomers, la generación X e incluso los millennials que trabajábamos en Campsared, estábamos acostumbrados a que nos encargaran otro tipo de tareas. Por entonces lo principal era limpiar: barrer, fregar, hacer los surtidores, limpiar baldas, dar lustre y esplendor a las vidrieras, limpiar baldas —ya lo he dicho—, y atender al público. Luego arribó un navegante portugués y dio al traste con todo. Llegó con su teoría del 1 + 1: un cliente, más una Coca-Cola, equivalía a más ganancia. Empezamos por pequeñas cosillas como vender helados, chicles o refrescos, pero luego la situación se complicó. En realidad fue un cambio en la mentalidad empresarial de todas las empresas: ya que el trabajador estaba ahí, había que sacarle el máximo provecho.
Empezamos a escuchar hablar de productividad, del valor añadido que suponía que los trabajadores combinaran sus tareas con la venta directa, que era la elevación al cubo de la venta por impulso. Desde entonces fueron introduciendo nuevas actividades, más trabajo, y para no subir el sueldo se inventaron los incentivos. El mundo había cambiado y lo más importante era ser productivo. «¡Productividad, productividad!», ese era el nuevo lema que agitaban las empresas; lo esencial era obtener más beneficios. Este método consistía en el uso eficiente del tiempo, la eliminación de distracciones y la implementación de hábitos saludables que beneficiasen a la empresa.